En 2013 se inauguró en nuestro barrio un edificio que cobija
la empresa Seniority, en calle Arturo Medina 4188, prometiendo
que este edificio revolucionaría el concepto de “residencias para el adulto
mayor”, donde las personas podrían encontrar la tranquilidad necesaria
requerida por los enfermos de Alzheimer, lo que les permitiría ser tratadas con
diferentes terapias en este entorno especial.
La realidad, como explican algunos vecinos es otra y se
preguntan ¿quién autorizo esta mega "casa
de reposo"?
Se quejan que “se ha saturado la otrora tranquila calle de
vehículos y camiones abastecedores y de auxiliares que se instalan en nuestros
antejardines a fumar, almorzar, descansar en los prados y dejar basuras”, lo
cual demuestra que nuevamente las autoridades que dan estos permisos no velan
por el bien de los trabajadores que prestan servicios, dejando en evidencia que
ellos no tienen las comodidades para efectuar su trabajo.
La situación llegó al colmo durante esta semana, situación
que se veía venir, cuando explotó definitivamente, con una huelga legal que ha
generado a la comunidad muchos inconvenientes, relacionados principalmente con ruidos
de pitos, gritos, vuvuzelas, etc.
Esta situación tiene a los vecinos tremendamente choqueados,
ya que además de soportar el ruido propio de una huelga, deben ser
testigos de las situaciones a las cuales
están expuestos los pacientes.