Ante los intentos
de la Cámara Chilena de la Construcción (CChC) de presionar a la Contraloría y
a la Corte Suprema, Patricio Herman indica que la CChC cree que “la certeza
jurídica debe estar establecida en un simple papelito. La certeza jurídica se
obtiene única y exclusivamente cuando los permisos son legales y son legales
cuando se hace bien las cosas.”
Revisa el Punto de
Vista de Patricio Herman, Presidente de la Fundación Defendamos la Ciudad en la
radio Bio-Bio:
Coincidimos con Herman,
en que ha llegado la hora en que conceptos tan importantes para una sana
convivencia de toda la sociedad chilena, como lo es el concepto de “certeza
jurídica” no deben ser manipulados ni tergiversados para tratar de salvarles el
negocio (ilegal) a malos empresarios que han construido edificios y siguen
obteniendo permisos otorgados fuera de la legalidad y las normas.
Este tipo de
manipulación fraudulenta del lenguaje jurídico y general, es lo que se facilitó
la creación de burbujas inmobiliarias como ya sucedió recientemente en Estados
Unidos y en Europa, nos estamos enfrentado, entonces, casi con toda seguridad a
las mismas malas prácticas que permitieron hacer este tipo de negocios ilegales
en USA y Europa, y el mismo perfil de inversionista viene ahora a destruir la
estabilidad económica y social que hemos conseguido los chilenos con gran
sacrificio de varias generaciones.
La conducta corruptora
que denuncia Herman estaría comprometiendo a algunos organismos públicos
chilenos que estarían avalando situaciones ilegales al no tomar acciones
eficaces ante las ilegalidades cometidas y que incluso se han declarado judicialmente.
En Ñuñoa es evidente el incumplimiento no solo de la ley, sino que las
resoluciones de los tribunales de justicia. Esta situación se agrava día a día,
porque ya no se trata de pisos más o menos, antejardines de más o menos metros,
sino de una autoridad que no cumple con la ley comprometiendo nuestro estado de
derecho y convirtiendo a algunos burócratas tecnócratas en verdaderos violentistas,
que en su actuar superan a los encapuchados en cuanto al daño material y
psicológico que están provocando en los chilenos al actuar absolutamente al
margen de la ley violentando incluso sus derechos constitucionales.
Debemos insistir en
el hecho, que además se están comprometiendo en este tipo de negocios las
jubilaciones de todos los chilenos, a través de que eventualmente se puedan incorporar
en estas inversiones ilegales los Fondos de Pensiones de las AFP. Esto es
conocido como “fondos alternativos” nombre que nos suena a todo y a nada, lo
que nos recuerda un poco las hipotecas sub prime. Para entender un poco lea la
optimista nota dada por nuestro superintendente de pensiones: http://www.elmercurio.com/Inversiones/Noticias/Analisis/2018/07/11/Macias-AFP-se-aprestan-a-invertir-en-el-sector-inmobiliario-y-de-infraestructura.aspx
La situación
descrita por Herman coincide plenamente con lo observado en Ñuñoa, Municipio en
el cual, ni aun que la misma Excelentísima Corte Suprema lo ordene, se toman
medidas para asegurar los derechos constitucionales de los propietarios de
viviendas y habitantes de Ñuñoa y ciudadanos en general.
Que se hable de
certeza jurídica bajo las actuales circunstancias por la Cámara Chilena de La
Construcción, en los términos que lo hace y tal como nos informa Herman,
resulta extremadamente amenazante, pues actúan como si fueran los únicos
propietarios en la ciudad, como si la certeza jurídica fuera parte de su dominio
absoluto y solo para ellos, como si no se pudiera constatar en la ciudad de
Santiago, la catástrofe económica, social y sanitaria que están provocando
algunos edificios de altura altamente densificados. Su posición resulta
preocupante, más aún si se constata que esta asociación gremial administra
además uno los fondos de pensiones más importantes de Chile, y del mundo como
es Hábitat. Decimos obviamente del mundo porque en el orbe prácticamente nadie
ha seguido el sistema chileno a pesar de su autoproclamado éxito.