Como ya informamos, los propietarios de viviendas de Ñuñoa, comuna ícono de la clase media empobrecida por las políticas tecnócratas de sucesivos gobiernos, se han visto afectados por un ataque pocas veces visto de inversionistas privados apoyados por grandes bancos y fondos de inversión como las AFP, que con desesperación buscan sus terrenos para construir edificios de altura altamente densificados, obteniendo jugosas ganancias en un negocio que es para todos los chilenos pan para hoy y hambre para mañana, destruyendo un ejemplo de comuna que debiera ser el modelo para toda la región metropolitana, no como una utopía sino que como el mínimo indispensable para el verdadero desarrollo de todo nuestro país en que los exuberantes números exitista de la “corte” gobernante no coincide con la realidad.
En este desatado afán de obtener mayores beneficios económicos con el menor costo, sucesivos gobiernos se han dedicado a cooperar con sus grandes financista dictando políticas que nos han llevado a una desigualdad en todos los ámbitos cada vez más insoportable, lo cual alcanza su máxima expresión en los nefastos efectos sociales y sanitarios de un planeamiento urbano usado por las autoridades dedicadas al negocio inmobiliario propio del capitalismo clientelista (Crony Capitalism)
En este contexto, hace algunos años, muchos propietarios de barrios amables y bien ubicados vendieron, creyendo que hacían gran negocio y luego con el dinero en el Banco se dieron cuenta que no había un lugar mejor ubicado para vivir o trabajar, que el de barrio en que muchas veces nació tenía sus amigos, parientes, etc.. De esta experiencia muchos de los que quedamos nos dimos cuenta que no había precio que pueda pagarse cuando se trata del bienestar de nuestras familias y comenzamos a defender nuestros hogares.
Así fue como desde el 2013 los Ñuñoinos luchan, organizadamente, por mejorar su plan regulador, aumentando las restricciones a términos racionales y más humanos lo que, curiosamente, en vez de alejar a las inmobiliarias estas continuaron haciendo negocios como las mega construcciones hacinadas manteniendo el municipio una serie de permisos y anteproyectos ilegales del pasado y otras ilegalidades como la derogación ilegal del art. 18 del PRCÑ.
De este modo, sucesivos gobiernos cada vez más alejados de nuestra realidad y entregados al negociado puro y duro comenzó a dictar normas que borran desde arriba lo que los ciudadanos han decidido.
Entre estas tenemos la que estableció las subidas de contribuciones en nuestra comuna que han significado que muchos Ñuñoinos debieron dejar sus propiedades, porque los pagos de contribuciones no las pueden cubrir, generándose un verdadero proceso de expropiación ejecutados por los gobiernos del capitalismo clientelista (en Inglés Crony Capitalism), que expulsan a los ciudadanos de sus propiedades para que los súper ricos las compren en negociaciones abusivas o derechamente en remates brujos como los del conocido caso de una señora de Zapallar.
Especialmente brutal fue la última subida que dejó a muchos adultos mayores sin las exenciones que les permitió seguir viviendo en sus casas, pagando sumas acordes con sus escuálidas pensiones.
Las autoridades gubernamentales, en sus cocinas ministeriales, a sabiendas, porque ya se les había advertido en la historia de la ley sobre transparencia del mercado inmobiliario que esto sucedería, dictaron normas que les permitieron subir las contribuciones sin que se pudiera saber en qué se basan para hacer el cálculo.
Cuando muchos ancianos se acercaron temerosos a reclamar, se percataron que el cálculo se hacía en base a las subidas de los valores de casas de su sector. Lo incomprensible, es que sus casas subían en un 100% o más de valor, mientras el IPC se mantenía en menos de dos dígitos.
Impuesto Secreto
Cuando se solicitó saber las ventas de qué casas que habían subido y habían sido consideradas por el SII, nos enteramos con estupor que la información no era posible de obtener, porque según las autoridades de gobierno decidieron que esos datos afectaban el secreto tributarios de los contribuyentes que habían hecho el negocio respectivo.
En consecuencia, se daba el caso que se nos aplicaba un impuesto sin que podamos saber en base a qué.
Sucintamente de eso se trata el problema generado por la elite gobernante y sus socios financistas y parientes, desligando desde ya a los sacrificados funcionarios del SII que deben someterse a esta falta de criterio de los gobernantes de turno que se han ganado el desprecio de sus propios electores.
Ante esto se recurrió al concejo de transparencia que nos dio la razón, luego la Corte de Apelaciones de Santiago que también falló a favor de los contribuyentes y finalmente, en un fallo histórico este 4 de enero de 2021 nuestra Corte Suprema decidió confirmar la sentencia de la Ilustrísima Corte de Apelaciones de Santiago que solo un medio de comunicación dedicado al periodismo de investigación cubrió:
Solo un Medio cubrió la Noticia
A pesar que solo Interferencia notó la importancia de lo ocurrido, debemos recordar que los matinales de los canales de TV oficiales y sus amigos, durante días cubrió el aterrador caso de una señora de Zapallar a la que le remataron su casa y expulsaron del lugar en plena pandemia, luego de por un atraso de tres meses le rematara a precio vil otro súper rico, miembro del club que ya debe estar amonándola a su gusto, para celebrar con sus amigotes la tremenda “movida” que hizo.
Interferencia también informó sobre este caso lo siguiente:
“Un indicio de cómo ha aumentado la plusvalía de la tierra en ese balneario es que hace sólo unos siete años esa propiedad pagaba contribuciones trimestrales de 227.000 pesos, según contó Virginia Struthers en la entrevista a La Segunda. Actualmente, el tributo es de 740.000 pesos.
El alcalde de Zapallar, Gustavo Alessandri, aseguró hace unos meses a Teletrece que el alza de las contribuciones se ha vuelto “un impuesto expropiatorio”, dificultando de paso sus planes para construir más viviendas sociales en la comuna.
“Gente como Vial son depredadores, como Gordon Gekko”, afirma un conocido residente de la comuna, que prefirió no revelar su nombre, en referencia al protagonista de la película Wall Street de Oliver Stone. “La codicia es buena. La codicia es correcta. La codicia funciona”, dice en una parte Michael Douglas, quien interpretó a Gekko.”
Curiosamente la misma señora afectada de Zapallar, comentó la noticia de nuestra causa en el diario digital interferencia en clarificadora misiva:
“Enviado por Vicky Struthers El Mié, 01/06/2021 – 11:33
A nosotros nos remataron La casa por 3 cuotas impagas. Jamás imagine que arriesgaba perder la casa. Todo el sistema está mal hecho...La forma de notificar la falta de información etc. Que culpa tienen las personas que son nacidos y criados en un lugar, que el vecino Logre vender su casa en una fortuna. Eso hace que le suban Las contribuciones y La obliga a tener que vender e irse a otro sector. Es un impuesto Expropiatorio en que el Estado es tu enemigo, favoreciendo a Las que más tienen a tener más, comprando a la mitad del valor y revendiendo al doble. El que puede comprar caro, que pague contribuciones caras pero el que está tranquilo por años con su propiedad, que pague un tributo razonable. A nosotros en 5 años nos subía de 250 000.- a 750 000 -4 veces al año. O sea el equivalente de pagas 250 000.- mensuales de arriendo por tu propia casa. Yo tenía previsto pagar en septiembre 2019 y me entere que fue rematada el 6 de agosto. Conozco personas que pagan una vez al año. Qué hizo que nuestra propiedad fuera elegida para ser rematada con solo 3 cuotas vencidas? Cómo es que muchas personas llegan a deber años y no seres rematan? Mucha falla de transparencia y ley NO pareja.....injusticia total.”
Creemos sensiblemente que nuestra sociedad debe transitar hacia el objetivo de que todo Santiago llegue a ser como nuestra otrora Ñuñoa en una democracia fuerte con políticas sociales eficientes en que todos los ciudadanos valen y pesan lo mismo ante la ley, y no una en que la sacrificada y golpeada clase media sea borrada del mapa dividiéndose la nación en vulnerantes y vulnerados, cuicos y flaites, transitando directamente como sistema a la dictadura del capitalismo clientelista o crony capitalism, como lo llaman los norteamericanos, donde nuestra elite gobernante nos ha arrastrado a niveles inimaginables para los ciudadanos de este humilde pero orgulloso país.
Pero mientras los Ñuñoinos tratamos de defendernos del círculo del poder que o nos envía nuevos impuestos desmesurados para expulsarnos, o nos expulsan de nuestros hogares a través de una normativa urbanística desquiciada por el dinero que olvidó el fin higienista del urbanismo lo que nos ha hecho presa fácil del COVID-19, este mismo círculo del poder se devora unos a otros en una batalla egoísta donde se descalifican entre miembros de los mismos partidos políticos y alianzas, y en definitiva tienen al Ñuñoino, sin saber quién irá de candidato para asumir como Dominus Romano de esta inmoral y cruel industria del negocio inmobiliario en que se ha transformado la Alcaldía de la Municipalidad de Ñuñoa.
