jueves, 29 de agosto de 2024

Manifestación para exigir filtros a AVOII! Sábado 31 de Agosto, 11:00 horas. Plaza Egaña, vereda norponiente. Convoca Red de Organizaciones Vecinales AVOII.

Manifiéstate para ayudar a proteger a los vecinos de Ñuñoa, La Reina y Peñalolén.

Vecinos de Ñuñoa, La Reina y Peñalolén llevan a la autopista AVO II al Tribunal Ambiental en causa Rol R N° 473-2024 (acumulada R N° 474-2024) para conseguir a través de la Justicia que se instalen sistemas de abatimiento de contaminantes en sus chimeneas.

La autopista AVOII emitirá 31 toneladas adicionales de monóxido de carbono cada año -por sobre lo actual-durante toda su vida útil. ¡Exigimos la instalación de filtros de contaminantes!

 Las 6 chimeneas no poseen ningún sistema de filtro que proteja la salud de los vecinos. La autopista se justifica diciendo que la contaminación le pertenece a los autos.

Indignación causó en la comunidad que el SEA (Sistema de Evaluación Ambiental) se haga eco de argumentación tan errónea indicando como que son los autos los que contaminan y esté tan desinformado o falte a la verdad al informar al tribunal que "el Proyecto incluye la instalación de tecnologías avanzadas de abatimiento de contaminantes en los ductos de ventilación" que es precisamente el punto principal de disconformidad con la comunidad. La comunidad exige que por credibilidad se diga en qué compromiso consta esta verdadera voltereta.

En 2022 el Servicio de Evaluación Ambiental (SEA aprobó el proyecto de autopista Américo Vespucio Oriente II (AVO II) en su tramo de Príncipe de Gales a Los Presidentes, el cual tendrá 6 pistas subterráneas y otras 6 en superficie en 5,2 kilómetros de longitud, completando el último tramo no renovado del anillo Américo Vespucio para el año 2028. Sin embargo, un grupo de vecinos de las comunas de Ñuñoa, La Reina y Peñalolén, organizados en la Red AVO II, ha venido trabajando desde 2020 apuntando a un aspecto perjudicial y poco conocido de la autopista: la presencia de chimeneas y salidas que concentrarán la contaminación de miles de vehículos que circularán por los túneles y la expulsarán a metros de viviendas y colegios.

 

El principal aspecto del diseño de AVO II que ocasiona el problema de la concentración es que las emisiones de miles de vehículos recorriendo 5,2 km de autopista se expulsarán por tan solo 3 chimeneas y 4 salidas. Por ejemplo, la conexión con Américo Vespucio Sur por sí sola emitirá 36,7 toneladas anuales de material particulado grueso, equivalente a tener 252 estufas a leña encendidas durante 8 horas, todos los días del año.

 

Y es que la contaminación de los túneles saldrá expulsada de dos maneras: mediante 3 chimeneas de 15 metros de alto y 4 salidas vehiculares. Esto aumentará la contaminación en 31 toneladas anuales de monóxido de carbono por sobre la línea de base, que es la situación sin proyecto; y significará un peligro para la salud especialmente de niños, personas mayores y pacientes crónicos con enfermedades respiratorias. También colaborará con el efecto invernadero y el cambio climático.

 

Mientras tanto, la Sociedad Concesionaria AVO II, empresa que ganó la licitación realizada por el Ministerio de Obras Públicas y es el titular del proyecto en su tramitación a través del Sistema de Evaluación de Impacto Ambiental, ha respondido en el Anexo de Participación Ciudadana del expediente que “el proyecto no tiene contemplada la incorporación de filtros puesto que las emisiones durante la operación no pertenecen al proyecto”. Respuesta que causa discordia en la comunidad, especialmente considerando que se trata de una autopista concesionada que cobrará TAG. Es evidente que debe existir un grado de responsabilidad sobre las emisiones que le permiten ejercer su actividad económica.

 

A mayor abundamiento, los vecinos agregan que los estudios ambientales de estimación de emisiones fueron realizados por la concesionaria sin hacer mediciones en el lugar, sino calculando en base a los datos de estaciones de Las Condes y La Florida, a 8 y 4 km de distancia del proyecto, respectivamente. Además, los cálculos de contaminación fueron realizados solo hasta el año 2030, el cual será apenas el tercer año de operación de una concesión que dura 45 años.

 

En Santiago existen dos antecedentes sobre autopistas interurbanas subterráneas, Costanera Norte y AVO I, que es el tramo que va desde El Salto hasta Príncipe de Gales, el cual ha sido cuestionado debido a filtraciones de agua en su interior. Sin embargo, esas vías no son comparables, ya que ambas fueron construidas como trinchera cubierta, por eso tienen un gran número de ventilaciones de gran tamaño y a mayor distancia de las viviendas, lo que disminuye los perjuicios a los vecinos. Esto a diferencia de lo que ocurre con AVO II, donde hay 5,2 km de autopista subterránea que va por debajo de la línea del metro y expulsa contaminantes por apenas 3 chimeneas y 4 salidas.

 

La solicitud que lleva adelante la Red AVO II no tiene precedente en nuestro país, debido a que no existen casos en que se haya instalado abatimiento de contaminantes en una autopista subterránea. Sin embargo, la tecnología para retener o filtrar la contaminación existe en el mundo hace décadas. Esto se hace hoy en países como Japón, Noruega, Corea del Sur, Vietnam, Australia, España, Francia, Italia y China. La Sociedad Concesionaria AVO II ni siquiera se ha abierto a evaluar la posibilidad.

 

A pesar de que los vecinos organizados en la Red AVO II hicieron observaciones en el Proceso de Participación Ciudadana pidiendo abatimiento de contaminantes, esto fue negado. Luego continuaron con reclamaciones administrativas ante el Comité de Ministros, quienes también rechazaron la solicitud. Por lo anterior, el 8 de julio pasado interpusieron una reclamación ante el 2º Tribunal Ambiental, la cual quedó agrupada bajo el rol R-473-2024 y se encuentra hoy a la espera de que el SEA envíe el informe requerido por la corte.

Declaraciones de dirigentes

 

Camila Donoso, Presidenta Junta de Vecinos Arturo Prat de Ñuñoa: “Las más de 7.500 personas que viven en nuestro sector se verán gravemente afectadas ya que recibirán el impacto directo de la contaminación de la chimenea Guillermo Tell, que está ubicada a un costado del metro Simón Bolívar, considerando que hay colegios y residencias de adulto mayor que están dentro del área de influencia de AVO II”.

Carmen Arévalo, Presidenta Junta de Vecinos Contramaestre Micalvi de Ñuñoa: “Nuestro sector se caracteriza por tener una gran cantidad de personas mayores, tenemos el colegio básico República de Siria, el Colegio San Agustín, un par de casas de reposo y algunos jardines infantiles, los que se verán afectados por las emanaciones de las chimeneas. La más cercana es la de Eduardo Castillo Velasco con Américo Vespucio. Estamos seguros que estas son un foco contaminante que traerá muchas consecuencias nefastas a nuestros vecinos y es por ello que les exigimos que instalen filtros.

Nicolás Zúñiga, Presidente Junta de Vecinos Plaza Bremen de Ñuñoa: “Es inaceptable que, en pleno siglo XXI, se desarrollen proyectos de esta magnitud sin considerar los efectos a largo plazo sobre la salud y el bienestar de las personas. Es esencial que se implementen sistemas de abatimiento de contaminantes para proteger nuestro entorno y asegurar que esta obra no comprometa nuestra calidad de vida”.

Rodolfo Acha, Presidente Organización Comunitaria Adoquines de Ñuñoa: “No conforme con dejarnos como zona de sacrificio donde no se acepta dar compensación alguna a nuestra comunidad fuertemente afectada con las obras, además se concentrará, en pocas chimeneas de 15 m de alto, la contaminación de kilómetros de autopista, donde por problemas constructivos estas chimeneas deben adentrarse en las primeras manzanas que bordean la autopista afectando casas y departamentos de vecinos. Si no se pone filtros a las chimeneas, esos vecinos y sus familias estarán en la práctica siendo envenenados. Eso no es aceptable”.